Lluvia y Apatlaco evidencian “chambonerías”

HUGO BARBERI

La intensa lluvia y la creciente desenfre
nada del Río Apatlaco, además de cau
sar severos daños materiales y lo más grave, pérdidas humanas en el estado, evidenció por otro lado la obra de “chambonería” que constituyó el tan llevado y traído puente Casablanca y su libramiento que corresponde en la piedra angular de la política y el comercio de la región sur de Morelos, Jojutla.
Una zanja de aproximadamente 80 centímetros (tal vez más) de ancho por 1.20 de profundidad que dejó el río a su paso por esta recién inaugurada obra de menos de dos meses, misma que se “cacaraqueó” con algarabía, bombo y platillo, bueno, al grado que el gobernador de los desprecios a Jojutla, y no es Jorge Carrillo, bajó en su helicóptero para inaugurarla.
Pero entre toda esa celebración para inaugurar dicha obra de relumbrón, un acto como todos de esa índole que causan identificación y sueño si no se pone uno vivo cuando está presente en esa clase de cosas, nunca se imaginaron -tal vez, algunos con nerviosismo discreto sí- que una creciente del río los evidenciaría. El caso es que la tarde de ayer se pudo observar la escasa compactación y la pobre capa de asfalto que cubre dicho camino, mismo que a menos de un mes de haberse dejado al paso de vehículos de todo tipo, con las primeras lluvias se evidenció.
El grado de “chambonería” de la obra llegó al punto de que dicho camino, que se constituye en dos partes, presenta daños severos que también evidencian lo citado, ya que por lo menos 200 metros del tramo hacia la carretera “molinos” está totalmente destrozado; es obvia y notable la proliferación de baches tanto en el centro como en las orillas.
El punto es que mientras la autoridad municipal o estatal, puesto que fue una obra en la que ambos gobiernos intervinieron, investigan quién es el responsable de todo esto, la sanción que le corresponde, si es que lo harán, la ciudadanía se quedará padeciendo de caminos dignos.
Este tipo de trabajo en Jojutla y Zacatepec es altamente crítico, en el caso del segundo hasta nulo y es preocupante la atención a los caminos, porque es una de las cosas que encabezan la lista de amplias desventajas que tienen los ayuntamientos de la región para el turismo. Para muestra un botón, los estragos de las lluvias perjudicaron los caminos de mayor tránsito vehicular en ambos municipios, pues tardaron más de 15 días en limpiarlos de arena y piedras de deslaves por las lluvias. Cada vez sobresalen más los baches, y en el caso extremo de “baquetonería” han llegado a instalar topes nuevos en carretera de poco tráfico peatonal, como el caso de Tlaquiltenango, Tlaltizapan y Zacatepec.

Pura Caña

Graciosa, simpática, increíble pero cierta, así lució la situación al ver “sentaditos” como niños buenos y en primera fila el alcalde de Zacatepec, Salomón Hernández Bravo y su acérrimo “señalador”, el concejal Juan Bello Ocampo, en la misa que realizó el jerarca católico Florencio Olvera en la parroquia de Zacatepec el pasado viernes, hay reconciliación o amnesia… En Jojutla ya se empieza a murmurar de nuevo; el regidor Martín López, muy condescendiente en cabildo aprueba todo, parece que gestiona una obra para beneficio de su hermano… Se quejan vecinos de la unidad Morelos de Jojutla por las imposiciones del nuevo titular del agua potable, Manuel Mondragón, al que denuncian de prepotente y de que ha llegado al lugar a imponer, imponer e imponer: sin sustento cortó el suministro a vecinos sin requerimiento alguno, lo mismo al campo deportivo, a la parroquia del lugar y ahora hasta quiere imponer nuevas formas de juego en los futbolistas que por años han mantenido solos los campos deportivos; se dice que si no se ayuda no hay que estorbar, pero coartar, imponer es asunto de fascismo ¿y las autoridades?… Eso del manejo de recursos económicos, un tema por demás difícil, pero que no deja en paz al ayuntamiento de Jojutla, sucedió primero con los baños, ahora fuentes cercanas al DIF, afirman que este organismo se gasta los recursos del estacionamiento sin que pasen por la tesorería. Lo mismo sucedía con los baños, donde sólo la que llaman coordinadora de protocolo, legislativa o quién sabe ahora con tantos cargos inventados en los ayuntamientos, Michel Chanes Martini, sabía cuanto ingresaba. Por cierto, su tío Arturo Martini, médico de profesión, durante los últimos 15 años ha vivido del erario municipal, teniendo su plaza en el sector salud; como médico en la zona de tolerancia, regidor en el periodo antepasado de Antonio Pastrana, prestaba también servicios médicos y vendía medicamentos para la presidencia municipal, tres funciones y recibía tres ingresos… Por ahí se anda presumiendo que ya lo logró. El regidor de Jojutla, Emmanuel Villegas, finalmente recibió un préstamo con cargo al erario o al pueblo, sin embargo, no fueron los cien, sino 50 mil pesos. A pesar de todo…